Los ecologistas proponen recuperar el humedal interior aprovechando el proyecto del yacimiento arqueológico
Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) pide al Ayuntamiento de Orihuela que aborde la restauración ecológica de los saladares de Arneva aprovechando la actuación en el yacimiento arqueológico de la Edad de Bronce que se sitúa en la zona, tras la compra de los terrenos por parte del consistorio. La propuesta ha sido elevada por escrito. AHSA propone la recuperación ecológica de uno de los humedales históricos de Orihuela, una zona húmeda halófila no costera, muy escasa en la provincia. El proyecto del Ayuntamiento para buscar restos arqueológicos y rehabilitar la zona, incluso con un observatorio de aves y la posible compra de los terrenos colindantes, supone una oportunidad, según los ecologistas, para recuperar esa zona húmeda «lo que es compatible y complementario a la actuación prevista en el yacimiento», señala el portavoz de AHSA, Miguel Ángel Pavón.
La zona actualmente está muy degradada por las roturaciones llevadas a cabo para su actividad agrícola. «Es una gran oportunidad para recuperar el humedal y su vegetación y fauna», explica Pavón. A pesar de que la Generalitat descartó hace años incluir este saladar en el catálogo de zonas húmedas de la Comunidad Valenciana, tiene mucha importancia puesto que allí se encontraba el invertebrado «Cephalota deserticoloides», especie vulnerable, de la que se pide que se rastree si hay ejemplares, o el galápago leproso, además del sapo corredor y aves como el buitrón o el martín pescador, y plantas como las salicornias. Los ecologistas piden, además, el deslinde y amojonamiento de la vía pecuaria de la colada de Buena Vida, que conecta los saladares con el río Segura, y configurar un acceso a pie y en bicicleta.