Desde mediados del mes de mayo, ornitólogos de AHSA han detectado la presencia continuada de una pareja de cerceta pardilla Marmaronetta angustirostris en el saladar de Agua Amarga, una especie catalogada como «En Peligro Crítico» en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas y que es objeto de un proyecto de conservación por parte de la Generalitat Valenciana.
Además se han detectado la nidificación de otras especies de aves acuáticas protegidas, entre las cuales se encuentran 8 parejas de cigüeñuela Himantopus himantopus, 4 parejas de avoceta Recurvirostra avosetta, 5 parejas de charrancito Sternula allbifrons y una pareja de tarro blanco Tadorna tadorna, todas estas especies forman parte del Anexo IV de la Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, en el que se incluyen las especies que serán objeto de medidas de conservación especiales en cuanto a su hábitat con el fin de asegurar su supervivencia y su reproducción en su área de distribución. Además una de ellas, el charrancito está catalogado como «Vulnerable» en el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas.
La inundación de este humedal está sujeta a un denominado Programa de riegos para el saladar de Agua Amarga, propuesto por la Mancomunidad de canales del Taibilla (MCT), donde se establece un calendario de inundación para diferentes esteros.
Este programa es aprobado con el condicionante de que los niveles de agua se mantengan en función de las necesidades de la avifauna nidificante y de las indicaciones de los técnicos de la Consellería de Transición Ecológica.
En años anteriores, AHSA ha registrado el abandono de diferentes parejas de aves acuáticas a causa del no mantenimiento de la lámina de agua, ante el temor de que este año se repita la situación, AHSA ha presentado sendos escritos, el primero dirigido a la Consellería de Transición Ecológica pidiendo que técnicos de esta Administración se pongan en contacto con la Mancomunidad de Canales del Taibilla (MCT) para indicarles la necesidad de mantener los actuales niveles de agua, con el fin d asegurar la culminación del ciclo reproductivo de las mencionadas parejas de aves acuáticas que están nidificando en el saladar de Agua Amarga. Un segundo escrito fue dirigido directamente a la CMT en el mismo sentido.
A comienzos de esta semana una técnica del Servicio de Espacios Naturales se puso en contacto con AHSA para informarnos de que habían reenviado nuestro escrito a la MCT y que si detectábamos una bajada de los niveles de agua que se lo comunicáramos.
En una visita, realizada ayer por la mañana, pudimos comprobar que los niveles se mantenían y que en esos momentos se estaba procediendo a la inundación de los esteros, aunque no pudimos detectar a las cercetas pardillas, sí observamos que las cigüeñuelas , avocetas y charrancitos continuaban en la zona, además de media docena de flamencos.