Durante este verano de 2022 hemos continuado realizando censos de fumarel común Chlidonias niger, durante sus concentraciones posreproductoras en el sur de Alicante. El objetivo de estos censos, consiste en conocer la evolución de la magnitud de estas concentraciones y a la vez obtener información sobre los cambios en la selección de los enclaves donde la especie se sedimenta para hacer acopio de reservas y mudar su plumaje, antes de emprender su migración hacia el África transahariana.
Esta temporada los censos, además de en las salinas de Santa Pola, se han realizado también en las salinas de Torrevieja, donde ya el año pasado detectamos concentraciones importantes de fumarel común. Los primeros fumareles migrantes los localizamos a lo largo de la primera semana del mes de julio aumentando paulatinamente su presencia desde esas fechas.
Este año ha vuelto a aumentar el número máximo de aves registradas, llegando a censar 12.400 ex. el 19 de agosto en las salinas de Torrevieja, en lugar de en las salinas del Pinet donde hasta ahora se realizaban las concentraciones más destacadas. El número máximo de aves censadas en las salinas de Pinet fue de 3.780 ex. el 26 de agosto.
La presencia de la especie entre ambos humedales ha sido muy irregular , así se censan en Pinet 3.000 ex. el 28 de julio y 2.050 el 2 de agosto, mientras que en el mismo periodo de finales de julio y principios de agosto, no encontramos más allá de un millar de aves en Torrevieja. Aunque en pocos días aumenta de forma rápida en este humedal con al menos 6.000 ex. el 9 de agosto y llegando al máximo, anteriormente comentado de 12.400 ex. diez días después. Por el contrario en Pinet hay un descenso claro en esas fechas con 1.335 ex. el 7 de agosto.
Este aumento de efectivos en el sur de Alicante, que roza el doble del máximo registrado el pasado 2021, coincide con un drástico descenso del número de fumareles en IJselmelmeer, humedal situado en Holanda donde se controla desde los años 90 las concentraciones postnupciales de la especie y donde se han llegado a censar más de 100.000 ex. en los años 90. Según nos comunica el investigador holandés Jan Van der Widen, a finales de agosto había unos 6.000 fumareles allí, número que cayó rápidamente en unos días, así a principios de agosto quedaban menos de 2.000 aves. Al parecer este descenso podría deberse a que la población de una de sus principales presas, el eperlano Osmerus eperlanus, se encuentra en niveles históricamente bajos.
¿El constante aumento del número de fumareles en el sur de Alicante estará ligado a los descensos continuados de efectivos en IJselmelmeer?
Los censos mencionados han sido realizados por Óscar Aldeguer Peral y Sergio Arroyo Morcillo