ARTICULO DE JOSE A.MAS EN EL INFORMACIÓN
La aportación hídrica de los últimos temporales y la subida del nivel freático permiten al enclave conservar la imagen de humedal. Medio Ambiente califica la situación de «positiva» para el entorno.
¿Va Elche camino de tener otro humedal? Esto es lo que parece a tenor del aspecto que presenta desde el pasado mes de septiembre el Fondet de la Senieta, en El Altet. Tradicionalmente esta zona presenta una lámina de agua cuando se registran precipitaciones, pero con el paso de las semanas los recursos hídricos se acaban filtrando y la superficie se seca por completo, dando paso a un aspecto de campos de cultivo.
Una dinámica que no se ha repetido estos últimos meses. Los vecinos indican que «lejos de disminuir el nivel del agua, está aumentando». Tanto es así, que hay colectivos de El Altet que han llegado a plantear la posibilidad de que se esté llevando hasta esta zona aguas depuradas, de la estación de El Altet o las que se recogen en Arenales del Sol cuando llueve grandes cantidades de agua.
Desde el partido El Altet Decide explicaron que «tras la DANA de septiembre venimos observando que la imagen del humedal se mantiene intacta, dando la sensación de un paraje anegado, como si fuesen unas salinas o marjal, en lugar de desecarse y dar paso a las tierras de cultivo que siempre ha habido». Esta situación, apuntaron desde el colectivo, se ha mantenido más aún después de las lluvias que se registraron en el último temporal del pasado mes de enero.
La Concejalía de Medio Ambiente, que dirige Esther Díez, atribuye todo lo que está pasando en el Fondet de la Senieta a un proceso totalmente natural, positivo y beneficioso para el entorno. La edil descartó que se estén realizando aportaciones de fuentes externas, y recordó que «el Fondet de la Senieta es una zona inundable, y con las lluvias de septiembre y enero ha recibido una cantidad importante de agua, lo que se une a que los niveles freáticos están muy altos, y por eso se mantiene la imagen de humedal».
La edil de Compromís insistió en que «estamos ante un proceso natural, y que es positivo, ya que las zonas inundables permiten que haya más biodiversidad, y riqueza ecológica. De hecho se están acercando aves acuáticas al crearse un entorno muy beneficioso para ellas». Según esta explicación todo parece indicar que la lámina de agua seguirá más tiempo, y más si se vuelven a registrar precipitaciones las próximas semanas.