LOS ECOLOGISTAS PIDEN AL AYUNTAMIENTO DE ELCHE QUE ESTOS TERRENOS SE INTEGREN EN UN CORREDOR ECOLÓGICO ENTRE LAS ZONAS HÚMEDAS DEL SALADAR DE AGUA AMARGA Y DEL CLOT DE GALVANY
Amigos de los Humedales del Sur de Alicante ha presentado alegaciones ante el Ayuntamiento de Elche contra la modificación nº 37 del Plan General, que pretende recalificar como suelo común de reserva (clave 52) hasta 10 hectáreas (100.000 metros cuadrados, equivalentes a la extensión de 20 campos de fútbol) actualmente protegidas como suelo de especial protección de montes y áreas forestales (clave 62), estando también reconocidas por la Generalitat como suelo forestal a través del Plan de Acción Territorial Forestal (PATFOR) de la Comunitat Valenciana. Terrenos que, además, el Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (PATIVEL) integra en el suelo no urbanizable de refuerzo del litoral.
AHSA afirma en sus alegaciones que es irrelevante el argumento, esgrimido por el Ayuntamiento, del cambio de titularidad de los terrenos, que fueron objeto, durante la anterior legislatura, de una “peculiar” permuta por la que pasaron de públicos a privados. Los ecologistas remarcan que su naturaleza forestal debe prevalecer al margen de cualquier otra consideración, como el tipo de propiedad, más aún cuando se sitúan en una franja litoral cuya estricta protección debe también prevalecer frente a su uso lucrativo.
Plantean que no debe desprotegerse ningún suelo no urbanizable del litoral ilicitano, un litoral que debe preservarse, en atención a sus valores ambientales y paisajísticos, de actuaciones de transformación como las que permitiría la modificación del Plan General: usos hoteleros, campamentos de turismo o usos deportivos. Consideran evidente que los nuevos usos permitidos van a desvirtuar la naturaleza forestal de los terrenos afectados al suponer la eliminación total o parcial de la actual vegetación forestal que acogen.
En ese sentido los ecologistas recuerdan al Ayuntamiento el informe emitido por la sección forestal de la Conselleria de Medio Ambiente advirtiendo que los usos permitidos “no deben desvirtuar su naturaleza forestal” y que “la modificación puntual puede derivar efectos significativos sobre el medio ambiente”, un informe con cuyas conclusiones coinciden los conservacionistas, por lo que solicitan a Ayuntamiento y Conselleria que la modificación se someta a evaluación de impacto ambiental.
En lugar de desproteger estos suelos forestales, el grupo ecologista propone al Ayuntamiento la creación de un corredor ecológico entre las zonas húmedas del Saladar de Agua Amarga, el Fondet de La Senieta y el Clot de Galvany, corredor en el que se integrarían los terrenos afectados por la modificación junto a otros suelos no urbanizables. Se trataría de un corredor litoral que abarcaría unas 111 hectáreas clasificadas en el vigente Plan General de Elche con distintas claves, proponiendo además que se valore que el Plan General establezca una nueva clave de protección, la clave 65, especial protección corredores ecológicos.
Los ecologistas advierten que este sector litoral, situado en el entorno de valiosas zonas húmedas, está sujeto a fuertes presiones urbanísticas, por lo que es vital que se desarrolle una adecuada política de ordenación territorial que garantice la conectividad entre los diferentes espacios protegidos y evite que éstos terminen rodeados de construcciones e infraestructuras.