Esta mañana a primera hora un bonito grupo de 80 grullas comunes (Grus grus) se encontraba en un saladar inundado junto a las salinas de Bonmatí, donde descansaba y se secaba las plumas después de las lluvias del día anterior. La presencia de grullas en las salinas no es muy habitual, menos aún en ese número y posadas.
En el informe del año pasado del Seguimiento de la grulla común en la Península Ibérica que coordina cada año Grus Extremadura, se hacía un comentario sobre la migración de grullas hacia el norte de África a través de la costa mediterránea. Como sentía curiosidad por saber que dirección tomaban, si seguían camino o se dirigían al Hondo o a Carrizales, hice una espera para saber hacia donde se dirigían.
Finalmente hasta las 10’30h no se decidieron a irse, cuando ya el sol calentaba poco. Levantó el vuelo la mayoría del grupo, quedando 10 o 15 grullas posadas, el grupo principal cicleó brevemente para tomar altura y una vez conseguida ésta, colocándose en formación se dirigieron hacia el sur – sureste, a mar abierto. Las grullas rezagadas, más remolonas, siguen la dirección de sus compañeras que se pierden en el mar. Seguirán costeando o atravesarán el Mediterráneo desde Alicante?
Satisfecha la curiosidad me dirijo hacia Carrizales, donde me cruza un bando de 21 ejemplares que vuelan hacia San Fulgencio y el Hondo de Amorós, parece que éstas tiene menos inquietudes migratorias que sus compañeras observadas en las salinas.
Texto y fotos Sergio Arroyo