El Hondo de Amorós, otra zona húmeda gestionada para uso cinegético que se suma a la ya larga lista de humedales del sur de Alicante que se dejan secar durante la temporada de reproducción. Recordamos que este magnífico humedal, situado en el término municipal de San Fulgencio, está incluido en el Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad Valenciana desde su aprobación en 2003, donde hasta no hace mucho nidificaba la cerceta pardilla Marmaronetta angustirostris y la malvasía cabeciblanca Oxyura leucocephala, motivo por el cual fue declarado como Zona de Recuperación en los planes de conservación de ambas especies.
La protección legal que goza, le ha servido de bien poco para conservar sus interesantes valores ambientales, hace dos de años fue arrasada la isleta de carrizo donde se instalaba una colonia de ardeidas y con ellas hasta medio centenar de moritos. Ninguna de las especies que lo hacían ha vuelto a nidificar allí.
Desde hace varios años cunde el ejemplo, entre propietarios y arrendatarios de humedales que son utilizados para disparar sobre las aves acuáticas, de que una vez finalizada la temporada de caza, desentenderse de ellos dejando que se queden secos, como es el caso del Hondo de Amorós, o vaciarlos directamente una vez finalizada ésta.
(S. Arroyo)
Las consecuencias para la aves ligadas al medio acuático que nidifican en nuestros humedales son nefastas, al privarles del medio que les permite reproducirse, pero en aquellas que como en el caso de la cerceta pardilla , se trata de una de las escasas áreas de reproducción existentes en nuestro país, resulta devastador para su escasa población.
En 2016, AHSA propuso a la Consellería de Medio Ambiente, que con el objetivo de evitar está situación, se vinculara la autorización de cazar en las zonas húmedas a que se mantuviera niveles de agua suficientes para garantizar la reproducción de las aves acuáticas, como en otras ocasiones no recibimos respuesta. Contrariamente, hace unos meses pudimos constatar documentalmente, lo que durante años fue una sospecha, la absoluta falta de control en la caza de aves en los espacios naturales del sur de Alicante, ahora sabemos que la Administración autonómica autoriza la caza indiscriminada, en determinadas especies varias veces el número de aves detectadas en los censos.