Los humedales salinos, de los que tenemos una buena representación en el sur de Alicante, albergan una amplia variedad de aves. Entre ellas encontramos una especializada comunidad de aves que aprovechan la presencia de los invertebrados acuáticos que prosperan en sus aguas, como flamencos, tarros blancos, gaviotas picofinas, avocetas y resto de especies limícolas que aprovechan la asombrosa abundancia del invertebrado más frecuente de estos medios acuáticos hipersalinos, la Artemia. Se trata de un pequeño artrópodo que pese a no medir más allá de 1 cm en su fase adulta, su abundancia sustenta buena parte de la avifauna de estos humedales, llegando a calcularse en la laguna de La Mata una biomasa de 108 kg/Ha, densidades modestas en comparación con las calculadas para otras zonas húmedas europeas como las salinas de Burgas (Rumania) con 250 kg/Ha.
En ocasiones los vientos concentran los ejemplares de Artemia, formando verdaderas sopas espesas, que son aprovechados por los bandos de aves que picotean afanosamente el agua y las orillas.