Crónica de la salida de AHSA a las salinas de Santa Pola

El pasado sábado 26 de septiembre organizamos la primera salida post verano abrasador. Como viene siendo habitual desde hace unos años rompemos el letargo veraniego con una visita vespertina a las salinas de Santa Pola.  A la cita acudimos siete personas en una tarde soleada y calurosa pero que el viento sureste que soplaba permitía no cocerse al sol.

Águila calzada
Águila calzada

Ya antes de comenzar el recorrido un águila calzada  nos da la bienvenida mientras volaba hacia la sierra del Molar, por el camino un grupo de 10-12 tardíos abejarucos vuelan desde los cables eléctricos a nuestro paso, también dos aguiluchos laguneros, macho,  y juvenil y luego más adelante un tipo hembra y  otra calzada de fase clara ya en el interior de las salinas.

Aguilucho lagunero juvenil
Aguilucho lagunero juvenil

Los bajos niveles de agua propiciaban la presencia de una bonita diversidad de limícolas. Los más numerosos fueron los  correlimos comunes con 47 ejemplares, con ellos picoteaban en los barrillos otras especies como correlimos menudos y zarapitines, chorlitejos patinegros y grandes, aguja colinegras, combatientes, archibebes comunes, cigüeñuelas y avocetas, además del paso en vuelo de un chorlito gris mostrando su negra axila. 

Correlimos común
Correlimos común

Durante el recorrido había un flujo constante de gaviotas cabecinegras que volaban desde el interior de las salinas hacia el sureste, contando un mínimo de 800 ejemplares, aunque el número era mayor al no contabilizar todas las que pasaban al estar distraídos con las observaciones de otras especies. Entre un pequeño grupo de cabecinegras nos llama la atención un graznido, localizando cinco pagazas piquirrojas que volaban hacia la zona exterior de las salinas.

Pagaza piquirroja
Pagaza piquirroja

Otras aves interesantes que observamos fueron un  grupete de 8 charrancitos, otra especie, al igual que los abejarucos, que cada año retrasa la migración de sus últimos ejemplares, y dos fumareles, uno común y otro cariblanco. Por último ya con la luz cenital de las nubes que cubrían el sol del atardecer observamos hasta 4 espátulas que nos sobrevuelan.

Espátula
Espátula

Un genial inicio de temporada de actividades.

Texto y fotos Sergio Arroyo Morcillo

Tarro blanco
Tarro blanco

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