
El pasado 1 de marzo Carlos Pardo Gómez encontró un cormorán orillado en el cabo Cervera que portaba una anilla metálica del Museo Zoológico de Helsinki. Una vez enviado el código de la anilla a esta institución, fueron remitidos los datos de anillamiento del ejemplar que había sido marcado en julio de 2021 como «joven fuera del nido», en la localidad finlandesa de Kirkkonummi en la costa báltica finlandesa a más de 3.000 km de la costa alicantina donde fue hallado.
Con este ejemplar son 5 los cormoranes grandes anillados y controlados en el sur de Alicante y el segundo procedente de Finlandia, también marcado solamente con una anilla metálica pero que fue leída con ayuda del telescopio, mientras descansaba en la desembocadura del río Segura en abril de 2011 ( Sergio Arroyo) y que había sido anillado como pollo en junio del año anterior en la localidad finlandesa de Taivassalo, a unos 200 km al oeste del lugar donde fue anillado el ejemplar hallado en cabo Cervera.
Dos cormoranes grandes marcados en Dinamarca, ambos también solo con anilla metálica, el primero de ellos un ejemplar depredado encontrado por Susana Noguera en El Hondo en febrero de 2022 que había sido anillado como pollo en Pikkerholm, isla costera del norte de ese país, en mayo de 2012. El segundo cormorán danés se trataba de un ejemplar posado en los escollos del cabo de la Huerta y leída la anilla por Jana Marco en abril de 2018. Y un quinto cormorán, éste con una anilla de lectura a distancia, que fue controlado en enero de 2015 en la desembocadura del río Segura por Jacobo Ramos, el ejemplar había sido anillado cerca de Neuchatêl (Suiza) en mayo de 2012.
Por su procedencia es muy probable que los ejemplares controlados pertenecieran a la subespecie sinensis que tenía sus principales poblaciones en el entorno del Báltico y que durante el siglo XIX fueron masacradas por la competencia por la captura de pescado. Más adelante sus exiguas poblaciones se vieron afectadas también por la contaminación por organoclorados (DDT). A finales del siglo XX las medidas de protección (la ssp sinensis fue incluida en el Anexo I de la Directiva de Aves) y la mejora de la calidad de las aguas de los principales ríos europeos, permitió una espectacular recuperación de la especie. Siendo retirada esa protección a mediados de la primera década del siglo XXI y estando autorizado, en la actualidad, disparar sobre los cormoranes grandes.