La semana pasada comenzaron las obras de desentubamiento del tramo del azarbe del Acierto que fue entubado en 2010 en el marco de las obras de urbanización del polígono industrial de Dolores.
Este entubamiento, al crear un efecto embudo, provocó el agravamiento de las inundaciones causadas por la DANA, de septiembre de 2019, en un amplio sector de la Huerta de Dolores. En esta zona que se encuentra junto al Parque Natural de El Hondo y la zona húmeda catalogada de Los Carrizales de Elche fue aprobado, en plena efervescencia de la burbuja especulativa, un proyecto urbanístico para construir más de 2.500 viviendas y un campo de golf, el conocido por Dolores Golf.
Tras la, «amarga», lección aprendida parece que las administraciones y las comunidades de regantes emprenden el desentubamiento de algunos de azarbes. Esta semana pasada conocíamos la noticia de que mas de 8 kilómetros del azarbe del Señor entre San Fulgencio y Guardamar serán también desentubados.
Desafortunadamente parece que el azarbe va a ser cementado y no va a recuperar su antigua fisonomía con orillas naturales, que permite una mayor capacidad de drenaje.
Es una lástima, se han alejado de este tipo de canalizaciones en muchos países, sobre todo porque ha tenido un impacto negativo en todos los ámbitos.
Las llanuras aluviales han existido durante siglos, pero abandonarlas ha demostrado repetidamente ser una mala elección.
Sí Peter. Hemos tenido que tener unas gravísimas inundaciones para que la administración y el resto de la sociedad se plantee un cambio en la política territorial de la comarca. No se hasta que extremo llegarán los cambios. De momento se sigue proyectando infraestructuras y desarrollos urbanísticos en zonas inundables.
A veces es beneficioso sacrificar un trozo de terreno agrícola para darle mejores medios de trabajo y vida a los habitantes de una localidad.
Siempre que los proyectos contengan todas las medidas necesarias.